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El estrés mal gestionado tiene un impacto negativo en la estudiante universitaria
El estrés desencadena una serie de respuestas físicas y químicas diseñadas para ayudarte a enfrentar situaciones de peligro o desafío. Sin embargo, cuando se vuelve crónico o excesivo, pasa a tener efectos perjudiciales en tu salud.
Observa algunas formas en las que el estrés puede afectarte como estudiante:
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Sistema nervioso: El estrés activa la respuesta de «lucha o huida» del sistema nervioso simpático, lo que provoca la liberación de hormonas como el cortisol y la adrenalina. Esto afecta a tu frecuencia cardíaca, la presión arterial y la vigilancia mental, preparando tu cuerpo para reaccione ante una amenaza.
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Sistema cardiovascular: Cuando el estrés es crónico es probable que surja un endurecimiento de las arterias, aumentando el riesgo de hipertensión arterial, enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. La frecuencia cardíaca elevada a largo plazo es peligrosa para el corazón.
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Sistema inmunológico: Si el problema es prolongado no se descarta que debilite el sistema inmunológico, lo que hace que seas más susceptible a infecciones y enfermedades. La liberación crónica de hormonas del estrés es probable que suprima la actividad de las células inmunes.
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Sistema digestivo: Puede verse comprometido causando problemas gastrointestinales como el dolor de estómago, diarrea, estreñimiento o síndrome de intestino irritable. Incluso afectar a la absorción de nutrientes en el intestino, por esta razón es necesario mantener el hábito de consumir un menú diario de calidad.
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Sistema respiratorio: Si le afecta el estrés se reflejará en una respiración rápida y superficial, lo que puede empeorar los problemas respiratorios en personas con afecciones como el asma. Incluso puede contribuir al desarrollo de problemas pulmonares a largo plazo.
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Sistema muscular: Si es crónico con probabilidad causará tensión muscular, lo que puede llevar a dolores de cabeza, migrañas, espasmos musculares y dolor en el cuello y la espalda. Seguramente te ha sucedido alguna vez, no tienes que preocuparte si te ocurre de manera puntual, solo procura organizarte mejor y no procrastinar tus quehaceres para el último momento.
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Sistema endocrino: Si es afectado, se alterará el equilibrio hormonal, lo que puede afectar la regulación del azúcar en la sangre, el metabolismo y el apetito. Esto afectaría al desarrollo de la obesidad y la diabetes tipo 2.
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Sistema nervioso central: El cerebro tampoco es inmune a los efectos nocivos del estrés, afectando a la disminución de la función cognitiva, la dificultad para concentrarse, la irritabilidad y la depresión.
Es recomendable que estés atenta a los efectos del estrés en tu cuerpo y busques formas de manejarlo de manera efectiva antes de que suponga un problema. Usar estrategias como la meditación, el ejercicio regular, la terapia y la adopción de hábitos saludables pueden ayudarte a reducir el estrés y sus efectos perjudiciales en la salud.
En los casos más graves de estrés crónico, es recomendable buscar ayuda médica o terapia para abordar los síntomas y aprender a lidiar con el estrés adecuadamente. Pero ten en cuenta que un poco de presión durante tu formación académica es algo saludable y necesario; te ayudará a estar en alerta ante fechas señaladas, obligaciones y compromisos como estudiante universitaria.